La Ciudadela fue encargada en 1805 por Henri Christophe y terminada en 1820. La fortaleza se construyó como parte de un sistema de fortificaciones diseñado para frustrar posibles incursiones extranjeras, en particular francesas. Es un símbolo universal de libertad, ya que fue el primer monumento construido por esclavos negros que habían obtenido la libertad. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1982, junto con el Palacio Sans-Souci, también mandado construir por Christophe, la fortaleza es considerada universalmente un monumento emblemático de Haití.
La misión abarca todas las fases, desde el anteproyecto hasta el proyecto constructivo. La propuesta de intervención pretende abordar las siguientes cuestiones: