El puente de Enrique Estevan sobre el río Tormes en Salamanca, fue proyectado en 1898 por el Ingeniero Don Saturnino Zufiaurre, finalizando su construcción en el año 1913 y constituyendo el primer puente de acero en España.
Se trata de un puente recto de 6 vanos metálicos (arcos de tablero superior) sobre pilas y estribos de fábrica de sillería, con unas dimensiones globales de 220m de longitud y 10m de anchura, distribuidos en dos aceras de 1,40m cada una y una calzada central de 7,20m con dos carriles. Cada vano consta de cinco arcos circulares metálicos de alma llena y 0,90m de canto, biarticulados, de 33,00m de luz entre apoyos y 3,13m de flecha, con un intereje de 2,40m.
Las principales actuaciones llevadas a cabo se centraron en, la plataforma, donde se reparó la barandilla existente; se adecuaron las aceras, dotándolas de pendiente transversal para evitar la acumulación de agua y la formación de hielo, y se suprimieron las juntas entre el tablero y pila que favorecía la percolación de agua desde plataforma y la consiguiente corrosión de la estructura metálica de arcos y montantes.
Por otra parte, se limpiaron y regeneraron los paramentos de sillería en estribos y se acometió una rehabilitación integral de la estructura de acero que estaba fuertemente aquejada de corrosión. Para ello se llevó a cabo una limpieza de la estructura metálica mediante la retirada total de las diferentes capas de pintura existente desigualmente adheridas, empleándose la técnica del hidrojetting, chorreado de agua a muy altas presiones.
Posteriormente se desmontaron y retiraron aquellos elementos que hubieran perdido más de un 10% de sección o se encontraran muy deformados por la formación de la herrumbre, especialmente en las uniones. En tercer lugar se trataron o restituyeron los elementos retirados y finalmente se aplicó un sistema multicapa de pintura para alcanzar un nivel de protección C4.