Puente sobre el río Tordera


Puente sobre el río Tordera
En la madrugada del día 22 de enero de 2020 se produjo el colapso de dos de los vanos centrales del puente sobre el río Tordera, situado en la línea ferroviaria Barcelona – Mataró – Maçanet-Massanes, entre las estaciones de Malgrat de Mar y Blanes.
El colapso fue consecuencia de una fuerte riada provocada por la borrasca Gloria, un fenómeno climatológico excepcional con rachas de vientos superiores a los 140 km/h y precipitaciones acumuladas cercanas a los 200 litros. La riada hizo colapsar una de las pilas del puente (pila 4) y a los dos vanos que apoyaban en ella (vanos 4 y 5), de los 14 con los que contaba la estructura.
Junto con el puente ferroviario, la borrasca Gloria arrastro al puente carretero perteneciente a la Generalitat de Cataluña situado a escasos 30 metros aguas abajo del puente ferroviario.
El puente se emplaza a sólo dos kilómetros de la desembocadura del río Tordera y marca la frontera entre las provincias de Barcelona y Gerona.
La solución
Tras el análisis y diagnosis del problema y, una vez acordado con ADIF, la necesidad de ejecución de un nuevo puente que solventará las carencias del existente, se iniciaron los trabajos de proyecto y tan solo unas semanas después los de obra.
A pesar de que el 2020 ha sido un año muy complicado se ha conseguido hacer el proyecto, obra y puesta en servicio en un tiempo récord de apenas 8 meses, gracias al esfuerzo combinado de ADIF, Grupo Puentes como empresa constructora, INECO e INES.
El nuevo puente sobre el río Tordera tiene 221.30 m repartidos en 5 vanos con una distribución de luces de 33.15 m + 51 m + 51 m + 51 m + 33.15 m. El tablero, de hormigón postesado, posee una sección transversal en U con dos grandes vigas laterales de canto variable elevándose sobre la plataforma en forma de velas. La reducción notable del número de pilas respecto al puente original, sumado al incremento del gálibo del tablero sobre el cauce, ha permitido aumentar notablemente la capacidad hidráulica del puente y cumplir con las exigencias del ACA frente a futuras avenidas del río Tordera, las famosas Torderadas.
Las pilas, a su vez, son de tipo pila – pilote (2 por pila), alcanzando su cimentación una profundidad de 40 m y terminando en un cabezal donde apoya el tablero. De esta manera, se han eliminado futuros problemas de socavación como los que presentaba el puente original y se ha evitado realizar excavaciones bajo el nivel freático para ejecutar un hipotético encepado y, por tanto, agilizar notoriamente el plazo.
