DESCRIPCIÓN DE LA ESTRUCTURA
Situado en el distrito de Hortaleza, bajo dos de sus vanos cruzan la calle Ribera del Loira y la plataforma ferroviaria. Esta estructura consta de tres componentes, uno principal y dos escaleras de acceso peatonal. El componente principal consiste en un viaducto de aproximadamente 175 m de longitud y su estructura se compone de un tablero tipo losa, repartido en seis vanos, con dos estribos y cinco pilas de tres fustes independientes cada una.
La losa está formada en los vanos centrales por tres cajones mixtos (hormigón y acero), mientras que en los vanos extremos los cajones son de hormigón pretensado. El ancho del tablero es de 21,70 m y su longitud total es de 174,00 m, repartidos en 6 vanos de 20 a 37 metros de luz cada uno, siendo los dos centrales los de mayor longitud.
La altura libre en los vanos centrales es de entre 9 m y 8 m. A ambos lados del tablero se localizan las impostas consistentes en módulos prefabricados de hormigón. Los estribos del puente son del tipo dintel-cargadero (1,20 x 1,00 m) sobre fustes cilíndricos (Ø 1,00 m) tras el cual se encuentra un muro de contención de tierra reforzada.

Como ya se ha dicho, el puente consta de cinco pilas formada cada una por tres fustes independientes de hormigón armado. El fuste central es de sección constante rectangular de 2,60 x 1,00 m, mientras que los dos fustes extremos son de sección variable, de 2,00 x 1,00 m (base) a 2,60 x 1,00 m (cabeza).
La cimentación de las pilas es directa (zapatas) pero no observable. Sobre la plataforma del puente se pueden observar dos juntas de dilatación, una sobre cada estribo, siendo en las calzadas del tipo ‘elastómero armado’ y en las aceras del tipo ‘perfil de caucho plegado’. La gran mayoría de daños observados en la estructura eran de gravedad leve o media. Destacaban las humedades localizadas en las vigas-cajón del tablero que eran un daño de gravedad alta, puesto que debido a una deficiencia en la impermeabilización del tablero, se filtraba el agua dejando eflorescencias y pátinas con manchas de óxido, pudiéndose haber iniciado procesos de corrosión en la armadura interior.
Esta deficiente impermeabilización estaba combinada con un sistema de drenaje que no funcionaba adecuadamente. La plataforma tiene fuerte pendiente longitudinal y las bocas de alcantarilla no se localizaban en los puntos más bajos ni en zonas planas, sino en tramos con fuerte pendiente, por lo que el agua apenas entraba por ellas.
En el tablero se encontraban varias zonas con fisuración y eflorescencias en las prelosas entre vigas y en los voladizos. La unión entre los módulos de la imposta y los laterales de la losa no era estanca, por lo que el agua se filtraba escurriendo bajo el tablero dejando pátinas y eflorescencias en la mayor parte del borde de los voladizos.
En el año 2009 tuvo lugar un atentado en la calle Ribera del Loira bajo el vano del puente. Un coche bomba de ETA estalló, causando los peores daños en la losa del puente, con desconchones en las prelosas de hormigón y en los cajones metálicos del tablero, provocando incluso alguna perforación y pérdidas del tratamiento protector…